Los Novicios con el Papa al comenzar la Semana Santa
No pudo haber mejor forma de iniciar la Semana Santa para los novicios paulinos en Roma: nos tocó servir como acólitos en la liturgia del Domingo de Ramos al Papa Francisco. Esto fue durante la celebración en la Plaza San Pedro y en este mismo día se celebró la 34° Jornada Mundial de la Juventud.
Dentro de nuestro proyecto comunitario y la programación del año de noviciado, se había propuesto vivir la Jornada de la Juventud en Plaza San Pedro, esto sin haber pensado en la posibilidad de servir en la liturgia de este día. Don Alberto Fusi, Procurador general de la Congregación y Superior de la comunidad paulina en el Vaticano hizo el anuncio a los jóvenes novicios al inicio de la Cuaresma y los invitó a prepararse para este acontecimiento.
El sábado precedente, a las 9:30 am, el grupo de 14 novicios junto al maestro, P. Tarcisio Cessarato, el Hno. Michele Eriani y clérigo Paschal Mbah, se reunieron junto al equipo de las Celebraciones Litúrgicas Pontificias para los ensayos de la celebración. Y el Domingo de Ramos, 14 de abril, a las 8:30 am, nos encontrábamos listos para desempeñar su servicio, no sin antes hacer las últimas pruebas con los ceremonieros.
El momento más emocionante llegó cuando todos los que serviríamos en la misa, acólitos y diáconos, fuimos reunidos en la pequeña capilla donde se encuentra la emblemática escultura del gran Miguel Ángel, “La Piedad” y que es lugar donde el Santo Padre se reviste para las celebraciones pontificias, y entre las sotanas moradas de los ceremonieros se distinguió la blanca y ¡he ahí! el Papa arribó y saludó a todos con gestos de ternura, calidez y fraternidad. Casi no pronunció palabra, pero su sonrisa lo decía todo. Poco a poco se fue acercando a cada uno de los presentes, nos dio la mano y ofreció un rosario y un pequeño libro: “No hablar mal de los demás”, la recomendación del Papa Francisco. Mientras eso ocurría, el sonido y los flashes de una cámara fotográfica rompían el silencio respetuoso de aquel hermoso momento. Y así, poco a poco, nos fuimos ordenando para iniciar el cortejo procesional.
Todos estábamos muy contentos. Experiencia inolvidable.
* Carlos Eduardo Aguirre Reyes, natural de Nicaragua, pertenece a la Provincia Colombia-Ecuador-Panamá y actualmente vive la etapa del Noviciado en Albano Laziale, Italia.